Don Javier, empresario con sentido social

publicado el 30 de Octubre de 2004 en El Heraldo de Saltillo.
Por César Elizondo Valdés


Don Javier, Empresario con sentido social.

En Kane & Abel, un best seller de la literatura contemporánea, el autor Jeffrey Archer narra la vida de dos figuras disímbolas que por distintos senderos llegaron al final de sus vidas a ser reconocidos como influyentes hombres de negocios; uno, Abel Rosnovski, que emigró de Europa hacía Estados Unidos sin nada más que un brazalete, que con trabajo, constancia e inteligencia logró escalar posiciones desde el más bajo nivel hasta encumbrarse como un distinguido miembro de la sociedad; el otro, William Lowell Kane, sucesor de un nombre y fortuna de generaciones, que, desde su condición logró acceder a donde nadie de sus antepasados pudo hacerlo.
En el transcurso de la historia, en varias ocasiones se cruzan los caminos de ambos personajes, siendo Abel quien primero identifica a Kane, etiquetándolo como un heredero carente de méritos, después Kane, quien a pesar de sus diferencias con el inmigrante, reconoce en él cualidades como la confianza, la capacidad y la paciencia necesarios para alcanzar sus metas. Abel, aún cuando tenia una elevada autoestima, siempre tuvo un sentimiento de envidia hacía Kane, nunca olvidó la ocasión en que este, siendo un alto ejecutivo y socio de un banco, le negó el préstamo que tanto necesitaba para despegar como empresario, albergando un resentimiento que nunca pudo ser superado. De cualquier manera, un inversionista anónimo sale al rescate de Abel, de ahí en adelante todo es éxito en su carrera empresarial. Al final de la novela, no recuerdo en que forma, le es revelado a Abel el nombre de aquel misterioso benefactor particular que en sus inicios le brindó el apoyo que tanta falta le hacía: William Lowell Kane.
Recuerdo ahora el libro porque cuando tuve la oportunidad de leerlo capté algunos conceptos de lo que es un empresario con sentido social, el cual, al final sabemos que era personificado por Kane, individuo que entendía que un negocio es concebido para generar riqueza, no solo a los socios, también a todos lo que ahí laboran, al gobierno vía impuestos, a los proveedores, a los clientes en forma de productos ó servicios; teniendo la obligación de tomar las decisiones necesarias para garantizar la continuidad de la fuente de riqueza, traducida en sueldos, prestaciones, dividendos, inversiones, impuestos, productos, etcétera; pero, por otro lado le permite hacer a su mano izquierda, que es la mano social, lo que su mano derecha no puede realizar por estar supeditada al razonamiento financiero. Así, el empresario con sentido social tiene el deber de mantener en óptimo estado el negocio para futuras generaciones de trabajadores y siente el compromiso de velar por las cuestiones de justicia social con recursos propios.
El sábado pasado, partió de este mundo Don Javier López del Bosque, un empresario que tuvo el temple, el carácter, la persistencia y la capacidad para crear fuentes de empleos y oportunidades para miles de mexicanos. En mi opinión, Don Javier fue un empresario con sentido social que tuvo el valor de encarar el difícil reto de ser medido con su padre, hombre también de grandes virtudes; el reto de ser líder moral de los empresarios, en una época de peligrosos fundamentalistas de izquierda; el reto de desarrollar, junto con su familia, un negocio a través de los problemas que enfrenta la industria como huelgas, devaluaciones, competencia desleal, siniestros, crisis económicas, contracción de los mercados, condiciones arancelarias adversas, cambios de cultura; lo anterior, aunado al importante legado en causas altruistas que con discreción ante la opinión pública promovió y al empeño por asegurar el bienestar social de los más desprotegidos, hacen de la pérdida de la familia López, la pérdida de toda la comunidad. Descanse en paz Don Javier López del Bosque. mjoly@terra.com.mx

¿Y que fue de la política?

publicado el 22 de Octubre de 2004 en El Heraldo de Saltillo.
Por César Elizondo Valdés


¿ y que fue de la política?

Es un hastío, recuerdo cuando uno leía el periódico y escuchaba las noticias para obtener información, hechos, puntos de vista y conocer la posición de los políticos en relación a diversas asignaturas; hoy, cuando vemos los encabezados de las notas periodísticas y los noticieros de los medios electrónicos, lo que obtenemos son chismes, acusaciones, justificaciones y declaraciones de personajes con delirio de persecución. ¿Es el pobre nivel de información consecuencia de lo que demanda el lector y el auditorio, ó es producto del bajo nivel en que se mueven los actores políticos de la actualidad?
Analizando partidos, vemos que el PRD, el partido que nació gracias a la coyuntura histórica derivada de una política económica liberal despreciada por la izquierda aunada al rompimiento con el PRI de algunos reconocidos miembros del mismo; a más de quince años de haber ganado la presidencia de la república en la urnas y haberla perdido por la caída de un sistema, los perredistas se aferran a candidaturas y políticas que, aunque fueron bien vendidas a millones de mexicanos, difícilmente podrán pasar el escrutinio del poder económico, que como es sabido, es uno de los primeros filtros para dar luz verde a una candidatura. Ante el complot, el PRD equivoca su estrategia e insiste en tratar de evitar su culpa en los hechos que todos atestiguamos, hundiéndose más con cada movimiento que realiza, regresa a sus inicios, la confrontación y ruptura con todos los que no les son afines, aún siendo del mismo partido.
En Acción Nacional, dónde sus seguidores tienen doble tarea, pegarle a Andrés Manuel al tiempo que se preguntan que demonios están pensando Vicente y Marthita; manteniendo la esperanza de que la administración foxista logre un repunte al final de sexenio que borre de la memoria colectiva cuatro años de desilusiones. Lavando la ropa sucia fuera de casa, estableciendo alianzas de todos con todos y nadie con nadie, porque a decir verdad, les pasó literalmente lo de aquel chiste, que al estar arriba no supieron como hacerlo, hablando de política, de lo demás abundaremos en otra ocasión.
Y finalmente, el PRI, el partido de los setenta años en el poder, el partido que de pronto se volvió oposición, perdiendo la oportunidad que como partido fuera del poder tienen para deshacerse de lastres, prebendas y corporativismos anclas que venden su posición al mejor postor; haciendo el triste papel de la familia que ante la orfandad, empieza a practicar el canibalismo, esperando que algún día regrese el padre que todo lo resuelve y a todos disciplina. Un PRI en el que su dirigente apuesta por la ingenuidad del pueblo creyendo que este prefiere a los malos conocidos que a los buenos por conocer, un PRI con encontradas vertientes que no se ponen de acuerdo, porque el concilio favorecerá políticamente solo a uno.
Al observar un poco la situación, el discurso y las actividades de los principales partidos políticos del país, deducimos que las notas recibidas por el público son fiel reflejo de la escasez de propuestas, acciones y planes de quienes manejan la política en México.
Concluyo que los partidos, en voz de sus legisladores, ejecutivos, militantes, dirigentes, funcionarios, etcétera, continúan haciendo política denostando al enemigo, tratando de probar que el adversario tiene más defectos, incapaces de demostrar sus propias virtudes; olvidan que el voto es una acción activa, que por lo tanto debe ser hecho por convicción, no por sanción. mjoly@terra.com.mx

Quinto informe

Para publicarse el 15 de Octubre de 2004-10-15
Por César Elizondo Valdés


Quinto informe

Hace cuatro años, estando los Estados Unidos en la mejor parte de uno de los mejores ciclos económicos de su historia, los electores norteamericanos le dieron la espalda a la fórmula demócrata que encabezaba Al Gore, quien obviamente decía garantizar la continuidad del éxito económico alcanzado por la administración de Bill Clinton siendo el mismo Gore vicepresidente. Viene a colación para explicar el porqué de los siguientes comentarios, los cuales se basan en aspectos positivos, ya que, como vimos con Gore, no importa que tan bien se haga un trabajo, en una democracia siempre habrá inconformes. Yo le dejo las quejas a otros, prefiero concentrarme en lo constructivo.
El día de hoy, el gobernador del estado, Enrique Martínez y Martínez rendirá su quinto informe de gobierno. Seguramente hablará de los logros alcanzados por las distintas áreas de la administración estatal, sobresaliendo el aspecto de la finanzas, en dónde la noticia ha sido ser el estado con cero deuda pública; en salud, con el arranque de la construcción del Instituto Estatal de Geriatría, único en su tipo en el país, así como el primer lugar nacional en cirugía extramuros; en desarrollo social, con programas emulados por el gobierno federal para combatir los índices de pobreza, alcanzando miles de familias un estándar más alto de bienestar social; en Educación, siendo uno de los primeros lugares en México en población alfabetizada; en desarrollo económico, donde con los recientes anuncios en inversiones dan luz en el camino futuro, en seguridad pública, siendo Coahuila uno de los estados más seguros del país y número uno de la frontera norte; en deportes, siendo reconocidos como el estado con mayor crecimiento; en turismo, con el anuncio de la incorporación de Parras al programa federal de pueblos mágicos; en obra pública, rubro en que a pesar de la falla de algunos particulares, la inversión está a la vista; en programas sociales, en contraloría, en el campo, en construcción de vivienda, en comunicaciones, en ecología, en la cultura, en la juventud, todo lo anterior, en un clima político donde las diferencias se dirimen y donde se respira un aire de libertad.
Algunos rasgos intangibles del estilo de Enrique Martínez para gobernar son para mi gusto parte esencial del éxito durante estos cinco años de gobierno. Es común que cuando un gobernante ó funcionario llega a su nuevo puesto intente dejar su sello personal en todos los ámbitos y programas de gobierno, ignorando en ocasiones el trabajo de sus antecesores é intentando descubrir el hilo negro, en el caso de EMM, ha sido positivo ver como ha sido promotor de actividades valiosas para la gente de Coahuila como la muestra nacional de antigüedades, la cabalgata, la carrera Saltillo 21K, por mencionar algunos casos, dándole importancia al beneficio que los eventos le dan a la población sin importar la paternidad del programa, así es como se hace patria, eso es nacionalismo, perpetuar las tradiciones, no las instituciones.
Las acciones emprendidas por la actual administración son del tipo que con el tiempo irán tomando mayor importancia, en una base financiera sana, con una población con mejor educación académica, con altos índices de bienestar social, el perfil de este gobierno será recordado como un gobierno preocupado por el futuro de sus ciudadanos, como el gobierno de un estadista.
mjoly@terra.com.mx

La verdad (p)

La verdad

Largo trecho he recorrido
en busca de una verdad,
no he llegado a ese destino
solo he visto falsedad,

hago un alto en el camino,
para poder replantear,
buscar la dicha anhelada,
sigue siendo prioridad.

pienso dejar de buscar,
donde no he encontrado nada,
mi estrategia ahora será,
saber la verdad negada,

la respuesta está sembrada,
adentró del corazón,
esa verdad anunciada,
al nacer la religión,

no es lo que uno ha conseguido,
ni lo que conseguirá,
es lo bien que me he esforzado, y
lo que hago por los demás.

es ponerme atrás de todos,
no en acto de sumisión,
ofrecer la otra mejilla,
en un afán de perdón,

es creer que hay paraíso
que está vida es un probar,
saber que mi Dios lo hizo,
y que me quiso invitar.

César Augusto Elizondo Valdés 10 de Octubre de 2004

Mi patrón

publicado el 08 de Octubre de 2004 en El Heraldo de Saltillo
Por César Elizondo Valdés


Mi patrón

Probablemente piensan que soy servil, lo tomo como un cumplido, el servicio es mi tarea; otros dicen que tengo el mejor trabajo del mundo, opinan que mi patrón me concede demasiadas libertades, no podría quejarme de mi empleo, pero les aseguró que, aunque quiero mucho a mi patrón, la verdad no es como creen.
Es cierto, rara vez está arriba de mí, de hecho, si yo no hago lo que él quiere, ó si me atrevo a ignorarlo, simplemente va y busca a alguien más; no tengo la obligación de pasar tarjeta, pero sé muy bien que ocho horas diarias no son suficientes para darle gusto a mi patrón, así es que aunque sin horario, termino siendo esclavo de mi trabajo buscando su aprobación; gozo de libertad para escoger un período de descanso para ir de vacaciones, pero cuando tengo recursos para ir, coincide con sus más grandes demandas; aún en mi enfermedad, ignora incapacidades, no es que me quiera mal, es solo que no lo sabe; siempre exige mi patrón la más alta calidad, sabe que si no soy yo, alguien más tendrá excelencia; no me obliga a hacer las mejoras que el mercado está pidiendo, pero tengo que interpretar su sentir para actuar en consecuencia, pues corro un riesgo muy grande si no entiendo lo que quiere; hay quienes dicen que mi patrón desconoce la lealtad, yo no creo que así sea, tal vez yo me equivoco cuando le quiero servir, él no falla en su nobleza, es mi virtud que no alcanza.
Siempre espero que me vea, tengo que estar en su mente, sé que a veces no me aguanta, pues mi acecho es persistente, solo espero que me entienda, es mi deber ir tras él. Algo que aprecio de él es su clemencia, en algunas ocasiones perdona mis deficiencias, me da otra oportunidad; generalmente muestra humildad, brindándome la confianza de enseñarle lo que sé.
En ocasiones es serio, no quiere que nadie le hable, dice estar solo mirando, pero yo bien lo conozco, sé que muy en su interior quisiera pedirme algo, yo tengo que respetarlo, nunca debo presionarlo, sé que más tarde ó temprano, regresará y me hablará. Otras veces quiere hablar, expresa algunos deseos, no siempre requiere de algo, de cualquier forma lo atiendo. Es lo más voluble que hay, nunca acabo de entenderlo, un momento quiere azul, al siguiente cambia a negro, pero sé porque lo hace, pues he estado en sus zapatos, nunca quiere equivocarse, por eso es que reza el dicho que el sabio cambia opinión. Así es y será por siempre, esto suena a paradoja, pero nunca va a cambiar de estar en constante cambio.
Me agrada lo que él ve en mí, sabe que puedo ayudarlo, si acaso me necesita, estoy listo a socorrerlo; unas veces me visita, otras veces yo lo hago, incluso en algunos casos, convenimos sin tratarnos; me da el gran reconocimiento de confiarme sus recursos, mi orgullo es la distinción de que a diario me hace objeto. Mi mayor gratitud a él, que permite el desarrollo, me da una realización que en mi labor he buscado, me ofrece el trabajo honrado que agradece mi familia. Le tengo tanto respeto, sobretodo porque sabe, él nunca se ha equivocado, siempre tiene la razón.
Mi patrón, mi gran amigo, eres tú, el cliente asiduo.
____________________________________________________________________________El próximo Viernes, quince de Octubre arranca la cuadragésima quincena del comercio que organiza la CANACO Saltillo, usted como cliente, aproveche que en nosotros los comerciantes organizados tiene un aliado, un servidor y un amigo. mjoly@terra.com.mx

Cuidado precandidatos

publicado el 01 de Octubre de 2004 en El Heraldo de Saltillo
Por César Elizondo Valdés


Cuidado precandidatos

Estando a dos semanas del quinto informe del gobernador Enrique Martinez y Martinez, los precandidatos priístas para sucederlo en el cargo parecen no poder esperar más para abrir definitivamente su juego. En la semana se publico la reunión de los operadores políticos del puntero, el alcalde de Saltillo Humberto Moreira Valdés; después, las declaraciones del Senador Alejandro Gutierrez exigiendo equidad en el proceso y respeto a los tiempos políticos; los diputados federales también dieron de que hablar, Oscar Pimentel dándole con todo a otro rival, vía el PRI estatal, Jesús Maria Ramón aprovechó la ocasión de representar al estado en la inauguración de una de las plantas construidas por su empresa y por otro lado urge a los demás aspirantes a poner ya las reglas de la sucesión; hay quienes piensan que Raúl Sifuentes empezó a cabildear con líderes de algunos grupos de poder, uno de los cuales opto por retirarse de algún consejo para ver los problemas desde afuera, en vez de ser protagonistas de la solución; quizás sea mucho pedir, pero sería sano ver más ejemplos de madurez como lo que ha demostrado otro de los posibles, Javier Guerrero Garcia, quién sigue haciendo su trabajo desde la secretaria de finanzas.
Por otro lado, el PAN aún con sus pugnas internas quiere capitalizar la lucha intestina que reina en el PRI, fortaleciendo cada vez más la virtual candidatura de Jorge Zermeño Infante, que además de estar aprovechando su posición en el senado, está sacando ventaja del hecho de ser lagunero, ya que en aquella zona la parte más influyente del electorado tiene la premisa de contar con un gobernador de la región, independientemente del partido que este represente.
En el PRI deben andar con cuidado, los grupos que se vienen formando desde meses atrás dan muestras de una pasión política que empieza a desbordarse, los golpes bajos entre gente del mismo partido le abre la posibilidad a los de enfrente, que si bien fueron borrados del mapa en la elecciones intermedias, cuentan en Coahuila con elementos suficientes para alcanzar a dar la sorpresa en las elecciones estatales de 2005. Se comete un error si se piensa que el PRI puede hacer lo mismo que hace seis años, una elección interna y desgastante para después ganar ampliamente la constitucional; más bien deben observar la lección de las elecciones federales del 2000, cuando el PAN no perdió de vista su objetivo, que era la presidencia, apoyando con todo a un candidato de unidad (en el fondo, no en la forma), y por otro lado el PRI, que se aventuró en unas elecciones primarias para elegir candidato, resultando ganador el oficial, Francisco Labastida, que al momento de la campaña presidencial hecho de menos el apoyo de los comités locales de su partido por la innegable ruptura que sufrió el institucional por la ambición de poder del perdedor Roberto Madrazo y del mismo Labastida.
Esta vez no hay políticos que entran a la contienda para negociar posiciones, todos dicen tener las cualidades y el trabajo que los respaldan, todos merecen la oportunidad pero solo uno será el candidato. Parece improbable que los movimientos de los precandidatos puedan influir en la decisión que tomará el partido para postular a su elegido, entonces, lo mejor sería darse una tregua para bajar los ánimos y poder encarar una elección constitucional con la unidad que todo partido necesita para ganar. Aunque dicen que al que madruga Dios lo ayuda, Dios no tiene nada que hacer en cuestiones de política, más bien pienso que no por mucho madrugar amanece más temprano. mjoly@terra.com.mx

Amiga (p)

Siempre has estado a mi lado,
de la infancia a marchitado,
en tiempos en que llorado,
también cuando he disfrutado,

después de nacer mis hijos,
también cuando se casaron,
cuando enfermaron mis padres,
cuando este mundo dejaron,

en las crisis de mi hogar,
han servido tus verdades,
han sido un ancla en el mar,
para sortear tempestades,

muchas veces te he buscado,
siendo honesto, a conveniencia,
para mi siempre has estado,
para aliviar mis dolencias,

otras veces tu has llegado,
sin haberte yo invocado,
pues algo tengo anidado,
que no hace falta el llamado,

has sido el viento en mi espalda,
cuando he podido avanzar,
has sido lluvia en la cara,
si me ha faltado rezar,

compartimos miles de horas,
que pensé que yo te daba,
haciendo el balance de obras,
hoy sé que yo te robaba,

soy consciente que fallé,
pero tu me perdonaste,
de a ti a veces me olvidé,
de mi nunca te apartaste

en el recuento de vida,
cuando habla mi corazón,
te recuerdo a ti, mi amiga,
mi bastión: mi religión.

César Elizondo Valdés

Carta a Maricarmen

publicado el 24 de Septiembre de 2004 en El Heraldo de Saltillo
Por César Elizondo Valdés

Carta a Maricarmen


María del Carmen Ramírez García.
Senadora con licencia por Tlaxcala.
Primera dama del estado de Tlaxcala.
Candidato a gobernador de Tlaxcala.

Estimada senadora-primera dama-candidata:
Estoy de acuerdo con usted, la dirigencia nacional de su partido, el PRD, no debería desacatar la orden judicial dictada por el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación en el sentido de reconocer su candidatura obtenida por un triunfo en las urnas para la selección de candidato a gobernar su estado. Es conveniente, de cualquier modo, pensar en lo que los políticos no cavilan en medio de la adrenalina electoral, no es solo quien te ampara, a veces es más importante sopesar quien no te apoya.
También coincido con sus declaraciones haciendo alusión a los deseos de su pueblo que aparentemente la respaldo en el proceso citado en el párrafo anterior, le dijo usted a los líderes de su partido (legales, no reales) que no se puede burlar la voluntad popular, menos, añadiría yo, en los escenarios actuales que comprenden elementos como la atención de los medios de comunicación, la necesidad de la gente por realmente elegir a sus gobernantes y el despertar de una generación de votantes que tropezaron con una trampa llamada publicidad y mercadotecnia para acceder a la democracia y la alternancia, trampa en la que ya no caerán.
Jamás estaría de acuerdo en que se le impida lograr sus objetivos a una persona por cuestiones de sexo, raza, religión ó ideología, aunque de esto no estamos hablando, creo que es mejor dejar en claro que su condición de mujer, lejos de ser un obstáculo, le es de gran ayuda. Debe, sin embargo tomar en cuenta que la mayor parte de quienes están a su alrededor, andan tras un proyecto personal, no necesariamente el de usted, no les crea todas las alabanzas, usted sabe de política, no permita que la ceguen.
Tampoco creo que el hecho de ser cónyuge del actual mandatario de Tlaxcala deba ser motivo de descalificación para su candidatura, aunque debemos recordar que no debemos hacer cosas buenas que parezcan malas, menos al revés. Pero puede pensar en la posibilidad de cambiar de nacionalidad, en Inglaterra, por ejemplo, se ve con buenos ojos a la monarquía.
Pero también debo decirlo, creo firmemente en verdades de la vida, como aquella que dice “dinero llama a dinero”, es natural, no son casualidades y en no pocas ocasiones no es por el valor del trabajo ó de las ideas, es por el implícito mérito del dinero, en este caso, concluyo, estoy ante lo que algunos quieren que sea la nueva realidad mexicana: Poder llama a poder.
Pero debe usted ser cuidadosa, ya que no es lo mismo heredar dinero que heredar poder. Para empezar, el dinero es de su portador, ó en todo caso tiene un dueño, el poder, por otro lado es de la gente, no debe tener dueño; el dinero, si alguien se lo propone, se puede ganar, el poder, implica mucho más que voluntad para ejercerlo; con el dinero, de cualquier forma que sea conseguido, usted puede hacer lo que quiera, con el poder, por el contrario, debe hacer lo correcto moral y legalmente. Como dirían los que anuncian sus tarjetas de crédito, tener poder no tiene precio, para todo lo demás existe master card.
Si tanto aprecia a su pueblo, si realmente tiene un proyecto de gobierno, haga un favor a todos incluida usted, espere seis años y vuelva a la carga, verá usted con una claridad que hoy no distingue, verá que la democracia no es selectiva. Entenderá entonces que no es lo mismo adentro que afuera, que no es lo mismo senadora que cenadora, y podrá sentirse orgullosa de experimentar no ser la primera dama, sino ser la primer mujer.
c.c.p. Maria Rubro de Hendricks, primera dama de Quintana Roo.
c.c.p. Martha García de Echeverría, primera dama de Nayarit.
c.c.p. Martha Sahagún de Fox, primera dama del país.
mjoly@terra.com.mx

El último piso

Publicado el 10 de Septiembre de 2004 en El Heraldo de Saltillo
Por César Elizondo Valdés


El último piso

Se despidió de su mujer embarazada, de su hija de 2 años y salió de su casa; tomo el metro para irse a trabajar. En el camino pensaba, ya que era el único momento del día en que tenía realmente tiempo para si mismo, dentro de una sociedad despersonalizada, en una cultura de individualistas, aún compartiendo medio de transporte con casi un centenar de personas, se sentía en soledad para divagar por los rincones de su mente; pensaba en su familia, no solo en su esposa que llevaba dentro a su bebe, no solo en su hija, la cual le había enseñado otra manera de amar y a quien todos los días le prometía un mejor futuro y mejores oportunidades, pensaba también en sus padres y sus hermanos, en sus amigos, relaciones y raíces que había dejado en México. Pensaba en el día de su regreso, llegaría de sorpresa para que sus padres no tuvieran que prepararse para recibirlo, les daría la alegría de verlo de regreso siendo un exitoso jefe de familia, con la madurez de quien es responsable de sus hijos, con el conocimiento y la experiencia para ser productivo y salir adelante en la vida.
Bajó del metro, al llegar a su trabajo, igual que todos los días, se sintió una vez más abrumado por los grandes edificios, la velocidad de las pisadas de la gente por la calle, respiraba las oportunidades que aquella ciudad le ofrecía, sentía que aquello era el centro del mundo, y lo creía, además, todos a su alrededor actuaban como si así fuera. Entró por fin a su edificio, bajo al sótano, checo su tarjeta y tomó su material de trabajo: aspiradora, sacudidor y trapo. Por el ascensor, subió hasta el último piso, como siempre, al abrir las puertas del elevador se encontró con las más lujosas oficinas que había visto en su vida, era el primero en llegar, había que empezar la limpieza antes de que los ejecutivos llegaran para que el tiempo fuera aprovechado, aún así, se dio tiempo para ver por los grandes ventanales, le impresionaba sentir la grandeza psicológica que le daba estar físicamente arriba de todos, era increíble como un humilde afanador podía sentir tal sensación de grandeza, la cual era prestada, el lo sabía, pero le gustaba observar cada día el mundo a sus pies.
De repente, un gran estruendo a lo hizo tirarse al piso por instinto, la luz se fue, ruidos de metales retorciéndose, vidrios y pedazos de concreto por todos lados, fuego unos piso más abajo. Sabía que algo estaba mal, ahora todo era silencio en aquel último piso vacío, fue hacía el ascensor, por supuesto, no había luz, mejor por las escaleras. Bajó algunos pisos, empezó a tomar conciencia de la compañía de otras personas, todos tratando de bajar por las mismas escaleras, las cuales antes parecían enormes, ahora, en la desesperación de evacuar, se veían demasiado pequeñas para tanta gente. Después, el infierno, imposible avanzar, fuego en el siguiente piso, personas que regresaban en vano a buscar otra salida, pasaron varios minutos de histeria y prefirió subir a esperar un milagro.
De nuevo solo, en el último piso, volvió a recordar a los suyos, está vez trató de recordar cada facción de las caras, cada timbre de voz y cada mirada; sabía que el milagro no llegaría, pensó que su muerte sería a causa del terrorismo y meditó en eso, lo peor del terrorismo, se dijo, no son las vidas que se pierden, ya que la mayoría de las religiones nos preparan para un más allá, la parte más dolorosa son los vacíos que una muerte injusta deja a su alrededor, en las vidas de familiares y amigos que ya no volverán a ser lo mismo y cargarán con un peso que no les tocaba llevar.
Entonces, escuchó como la estructura del edificio cedía al calor y al peso, empezó a sentir que caía junto con todo aquel piso vacío y tuvo para su esposa embarazada y su hija, sus últimos pensamientos. mjoly@terra.com.mx

Si yo fuera fuero

publicado el 3 de septiembre de 2004 en El Heraldo de Saltillo
Por César Elizondo Valdés

Si yo fuera fuero

Si yo fuera fuero, le pediría a Andrés Manuel que me abandonará, le diría que yo nací para defender a quienes se persigue sin haber cometido delito, para garantizar que los funcionarios públicos no sean obligados para atender procesos injustos que les podrían imputar por razones políticas ó de presión. Le explicaría que el hecho de que por razones políticas le saquen ahora sus delitos ya sentenciados, no lo exime de sus responsabilidades.
Le propondría sujetarse como todo mexicano debe hacerlo, a las leyes y a la autoridad competente por la falta que cometió; le preguntaría porque se ocupa más en defender su fuero que en defender su causa, lo cual si está en sus manos; le reclamaría por aferrarse a una figura jurídica para evadir sus deberes, uno de la cuales es , precisamente, cumplir y hacer cumplir la leyes; le señalaría que juegue como exige que lo demás lo hagan, con limpieza, independientemente de cómo lo hagan los otros; le recordaría que la mayoría de los votantes de este país pagan impuestos, aunque no nos guste, porque estamos sujetos a un estado de derecho del cual emanan todas las responsabilidades que como ciudadanos tenemos, y que con su postura, evidencia su falta de respeto a ese estado de derecho; le reprocharía por los tiempos que no volverán, del autoritarismo, del presidencialismo, de los intocables, y por consecuencia, la época de los gobernantes que creyeron ser más grandes que su pueblo.
Si yo fuera fuero, le reconocería a Andrés Manuel su verdad, que lo quieren inhabilitar para ser candidato a la presidencia; así mismo le haría ver que lo mismo hacen con los otros precandidatos, lo mismo harán con los que vengan y lo mismo se ha hecho siempre; le insistiría en dejar de hacerse el mártir para convertirse en mártir, ya que desde mi punto de vista, es el único camino que le queda para pasar a la historia de manera grande y digna, aunque sin ser primer mandatario. Le expresaría mi percepción de que no solo pierde su tiempo como regente de la ciudad más grande del mundo en una lucha que no podrá ganar, también pierde en imagen, la cual es más pequeña y más ridiculizada con cada escándalo.
Si yo fuera fuero, le manifestaría de una vez por todas a Andrés Manuel que ya no lo puedo aguantar, que mi función es asegurar la legalidad de los procesos contra los funcionarios, que mi misión no es dejar que los servidores públicos sean inmunes cuando sean culpables de actos ilícitos. Además le mencionaría que yo no tengo voluntad, ya que son los legisladores, personas de carne y hueso, con compromisos, ideales é intereses quienes son responsables del fallo que dictará si continúo siendo su escudo ó si desaparezco y se le obliga a cumplir con su proceso.
Si yo fuera fuero, me avergonzaría de que se me use como defensa de sinvergüenzas, no como protector de nuestros representantes. Pero como no soy fuero, y todo lo que valgo para Andrés Manuel es un voto, le diré que jamás desperdiciaría mi voto para darle el poder a quien ha dado tantas muestras de su desprecio hacía lo que los mexicanos hemos construido a través de muchos años, mucho sacrificio y muchas penas: el estado de derecho.
mjoly@terra.com.mx

El triunfo de Ana Guevara

publicado el 29 de Agosto de 2004 en El Heraldo de Saltillo
El triunfo de Ana Guevara

Por César Elizondo Valdés


A Vince Lombardi, entrenador de la NFL y creador de la dinastía de los años sesenta, los empacadores de Green Bay, se le atribuyen algunas de las más famosas máximas deportivas de todos los tiempos, “ganar no es lo importante, es lo único”, “en el deporte no hay espacio para los segundos lugares”, “el segundo lugar es el primero de los perdedores” y otras por el estilo. Las sentencias de Lombardi han sido como una biblia para entrenadores, deportistas, motivadores, líderes de gente, debido a su carácter motivacional, más que formativo. Estoy de acuerdo en que son basura las tercermundistas ideas de que lo importante no es ganar sino competir, que debemos esforzarnos sin esperar nada a cambio, que el deporte se debe ver como un medio, no como un fin, etc.; pero también debemos reconocer que hay derrotas que enaltecen el espíritu y de las cuales sacamos más provecho del que imaginamos, aprendiendo en la adversidad las verdades de la vida, que, dicho sea de paso, sería genial que todos las pudiésemos experimentar en el terreno deportivo para no repetirlas en ámbitos más trascendentales para el ciudadano común.
Es por eso, y por la actitud de Ana Gabriela Guevara al no poder ganar la medalla de oro, que me doy cuenta del gran triunfo personal que el segundo lugar será para la corredora, aún cuándo en este momento ella no este conforme con el resultado de la competencia. Estar preparada para ganar el oro y salir con la plata, fue sin duda un gran golpe que ha templado más su carácter; invertir miles de horas, sacrificar vida personal, diversión y familia en busca de un sueño para ver desde el podio izar la bandera de otro país por encima de la nuestra y escuchar respetuosamente el himno nacional de las Bahamas en lugar del mexicano, es mucho más pesado para ella que lo que nos puede pasar a muchos en nuestro trabajo y responsabilidades profesionales. Pero sin duda, en su interior sabe que su esfuerzo merecía el oro, igual que las demás competidoras, comprende y acepta que solo puede haber un primer lugar, pero eso no impide que existan más ganadores, ahí es donde las palabras de Lombardi dejan de ser verdades.
Los que hemos tenido la fortuna de ganar algún campeonato, sabemos el gran sabor que tiene el triunfo, los que hemos participado en una carrera de fondo, entendemos la importancia de competir, por arriba de ganar, ya que compites contigo mismo, no contra los demás corredores. Puestos en la balanza, me es difícil escoger el momento de más orgullo deportivo que he experimentado: ganar un campeonato en fútbol americano después de una carrera infantil-juvenil de ocho años, ganar un torneo de golf individual ó cruzar la meta de los 21 kilómetros en dos horas y siete minutos, más de una hora después del ganador. Cada reto que emprendemos tiene diferentes formas de premiarnos, siempre que estemos comprometidos en lo que buscamos, aún si no lo encontramos.
Al pasar los años, los mexicanos recordaremos vagamente a una corredora de las Bahamas que derroto a Ana Gabriela, pero seguiremos recordando con profundo respeto a una mexicana que superó sus propios limites y las fronteras impuestas por los detractores de los soñadores, a una mujer que puso el nombre de México en el mapa de las competencias de velocidad, alguien que con su entereza y ejemplo fue inspiración de una nueva generación de mexicanos triunfadores; en ese momento, las palabras de Vince Lombardi perderán todo su sentido para los mexicanos, porque aún en la derrota, Ana Gabriela será siempre nuestra campeona. mjoly@terra.com.mx

Las Olimpiadas y la frustración de la gallina

publicado el 27 de Agosto de 2004 en El Heraldo de Saltillo
César Elizondo Valdés


Los Juegos Olímpicos y la frustración de la gallina

Trate de evitarlo, pero al ver que todo México se empieza a colgar las medallas, termine por entrarle a la crítica a la delegación que nos representa en Atenas 2004, un grupo con algunas individualidades, ningún equipo y un ejercito de personajes de pantalón largo que disfrutan sus vacaciones como cada cuatro años. Es justo reconocer el esfuerzo de los deportistas, los cuales cumplen con los parámetros exigidos por el comité olímpico internacional, pero que ese nivel no les da para alcanzar la gloria, excepto, ya lo sabe usted, los casos de Ana Guevara, Oscar Salazar y Belem Guerrero, quienes con sus medallas de plata forman parte de lo mejor del mundo deportivo, no así México como delegación.
Desgraciadamente, el resultado en Atenas volverá a ser ignorado como es la costumbre de nuestras autoridades, olímpicamente. No soy crítico del gobierno por sistema, más bien mi posición siempre ha sido menos estado y más sociedad, he sostenido que lo que nos pasa es el resultado de las acciones de la sociedad en su conjunto, no del individuo gobernante; pero en está ocasión, tengo que culpar al gobierno por el repetitivo fracaso en cuestiones deportivas que nos acompaña en donde nos presentamos. Es inaceptable seguir con la cultura de que lo importante es competir, de dar el mejor esfuerzo sin esperar resultados, de que estamos sembrando, de que estamos en camino a ser una potencia, de que no se pueden tener resultados en seis años. Escucho eso desde los primeros juegos olímpicos que recuerdo, Moscú 80, han pasado 24 años y ahora ni siquiera somos contendientes en boxeo, caminata, maratón ó diez mil metros, competencias que por nuestra constitución física y herencia nos favorecen.
El deporte es parte esencial en la formación del ser humano, las partidas presupuéstales más importantes van para la educación, y el deporte está considerado dentro del ramo educativo; me gustaría ver un día un programa de becas y seguimiento para deportistas a futuro, que cada niño que sueñe con ganar una medalla olímpica ó un mundial de fútbol no dependa de la situación económica familiar, de la suerte ó de abandonar sus estudios para cumplir sus sueños, ó al menos intentar llegar a ellos, ya que lo educativo del deporte está en los medios, no en el fin, la mitad del orgullo es la preparación y la otra mitad es el triunfo; y por supuesto, a mayor cantidad de atletas de alto rendimiento, más éxitos deportivos para nuestro país. Espero que cuando eso pase, sigamos conservando el orgullo por cada medalla que ganen nuestros deportistas, que no caigamos en la indiferencia hacía el esfuerzo individual que cada participante realiza, que el presidente en turno continúe con la tradición de llamar a los ganadores, así tenga que hacer 50 llamadas cada olimpiada. Pero por ahora, lo que tenemos es el presente, que hace muy poco le llamábamos futuro.
Sabiendo que los mexicanos con capacidades diferentes son campeones en juegos olímpicos especiales porque han derrotado a la adversidad, después de conocer a través libros, periódicos y medios electrónicos los ejemplos de personas de nuestra raza que han alcanzado los niveles de excelencia como Hugo Sánchez, Ana Guevara, Armillita, Raúl Gonzalez, Fernando Valenzuela, Ernesto Canto, Adrián Fernandez, Fernando Platas, Lorena Ochoa, Raúl Ramírez, entre otros, todos ellos producto de su propio esfuerzo, huérfanos del apoyo del gobierno, en materia deportiva, como en tantas otras, sufrimos en México la frustración de la gallina: tener alas y no saber volar. mjoly@terra.com.mx