Brazaletes

Publicado el 24 de Noviembre de 2006

Cuando un problema parece no tener solución, se deben buscar alternativas diferentes a las prácticas usuales para encarar dicha cuestión. Por la sobre población que los reclusorios presentan en el Estado, el gobierno de Coahuila pretende reformar los Códigos Penal y de Procedimientos Penales para regular el uso de brazaletes de seguridad para personas que hayan cometido delitos no graves.

La medida, además de ofrecer una solución inmediata a los problemas logísticos y financieros que la saturación de reclusos provoca en los Centros de Readaptación Social, mejoraría las expectativas de miles de ciudadanos cuya situación familiar es calificada como irregular.

Integrar con más prontitud a la sociedad a aquellos reclusos que en su expediente no tengan antecedentes de violencia, será mejor que tenerlos purgando una condena dentro de un ambiente cargado de pesimismo en el que en muchas ocasiones, lejos de readaptar, hecha a perder.
8444104775@prodigy.net.mx

Un sexenio en una foto

Publicado el 24 de Noviembre de 2006
Pocas cosas son tan verdad como aquello de que una imagen dice más que mil palabras, con los avances tecnológicos que permiten la reproducción masiva de cualquier fotografía, diagrama, dibujo ó cosa que simbolice algo, el mundo se comunica y entiende por imágenes, esto es más claro aún en el entorno general de querer percibir todo sin esfuerzo intelectual. Esta verdad es la que ha puesto en peligro de extinción a los escritores cuya narrativa esta siendo sepultada, al menos comercialmente, por el cine y la televisión.

Buscando representar en una imagen lo que queremos sintetizar, podemos ver en una fotografía de Octubre 1968 el resumen de seis años de gobierno diazordacista: La mano de hierro utilizada por un gobierno que por nada se permitiría perder el control político del país. Otro de tipo de placas fueron el legado que caracterizo al sexenio de Luis Echeverría. El lema de “Arriba y Adelante” fue inútilmente utilizado para toda clase de puestas en marcha de programas de apoyo al campo que descansaban en sueños de grandeza más que en la realidad de la agricultura nacional; Tecnología y equipo de trabajo desperdiciado volviéndose obsoleto día con día, fue la imagen de la primera mitad de esa parte de nuestra historia moderna que fue satirizada como la docena trágica.

Un video en el que se puede ver a un hombre de cejas pobladas llorando por haberle fallado a su país es lo que sintetiza al gobierno de José López Portillo. Una nación que se debió haber preparado para administrar la riqueza, terminó derramando lágrimas de impotencia por no haber sabido defender como hombres aquello que nos pudo haber puesto en el primer mundo.

Luego viene a nuestra mente la imagen del Hotel Regis de la ciudad de México, los escombros de lo que fue algo grande después del terremoto de aquel 19 de Septiembre de 1985. La metáfora con un país que se desplomaba por descansar sobre una estructura ruinosa que no podía soportar ninguna sacudida, todo ante la ausencia de un presidente que ni siquiera se dio cuenta de cómo fue que llegó a la primera magistratura su sucesor.

De ahí a Carlos Salinas de Gortari, una administración dinámica cuya imagen parecería ser lo que llaman un collage, es decir, un mosaico en dónde aparecen diversas expresiones. Desde la sublime posición internacional que los logros económicos hicieron posible, hasta las inauditas muestras de podredumbre política que fue resumida en el asesinato de un candidato presidencial.

La última parte del siglo pasado, Ernesto Zedillo, cuya imagen presidencial parece engrandecerse con el paso de los años. En lo que pensamos cuando evocamos al último presidente priísta, es en algunos adjetivos que sintetizan lo que debería ser la investidura presidencial: Mesura, dignidad, inteligencia, madurez, compromiso, estadista.

Y finalmente, el sexenio que agoniza. La imagen que a mi juicio simboliza al gobierno del cambio, es aquella fotografía en la que “El Roñas” aparece poniéndole los cuernos al Presidente Vicente, con todo lo que rodea al contexto de la historia de ese hecho: “El Roñas”, encarnando al pueblo, mofándose del primer mandatario porque nada tiene que perder; Fox, en lo que fue su conducta regular durante toda la administración, minimizando el caso, buscándole el lado jocoso, defendiendo al recluso y ofreciéndole oportunidades; la opinión pública y los partidos políticos, dando cuenta de hechos triviales ignorando el fondo de todo lo que pasaba en el país. Y hoy en día, “El Roñas” no es una mejor persona, ni Fox le dio seguimiento a las promesas que le hizo, ni la opinión pública se ocupa de las cosas verdaderamente importantes en este país.
8444104775@prodigy.net.mx