Las comparaciones son odiosas, pero...

Publicado el 28 de Julio de 2006

Vi el arco blanco que de alguna manera me recordó a la principal cadena de comida rápida en el mundo, pero este arco no es amarillo, así que al notarlo supe que ya estaba en territorio de San Luis, seguí mi camino durante un buen rato hasta que llegue al hotel al que me habían invitado por conducto de uno de mis proveedores para asistir a una exposición del ramo en el que trabajo.

En el hotel, un cubículo estaba ocupado por una persona designada por el comité organizador del evento, está señorita era la encargada de dar la bienvenida e información a los visitantes de la expo. Me entregó un programa así como el típico paquete con productos tradicionales de la región, con el programa me enteré que durante todo el día habría un servicio de transportación gratuito del hotel a las instalaciones en las que se llevaría a cabo la muestra.

Al siguiente día, establecí contacto con mi proveedor y me puso al tanto de la finalidad de aquella exposición: Como ya lo habíamos platicado con anterioridad, el hecho de atender la invitación que me hacían no me obligaba legal ni moralmente a favorecerlos con la decisión de compra que tengo dentro de mi empresa, así que todo lo que él buscaba era presentarme con otros expositores con los que yo jamás había tenido trato alguno, los cuales recíprocamente lo contactaban a él con sus respectivos clientes.

De ese modo, pude conocer de cerca a muchos proveedores que pueden significar para mí la ventaja competitiva que uno siempre busca para ser la mejor opción para la clientela, ellos a su vez vieron en mí y en los demás invitados la posibilidad de ampliar su radio de acción a través de pequeñas empresas que les permiten cubrir nichos de mercado desperdiciados por otros fabricantes que ponen todo su empeño en diferentes productos.

Al cuestionarles sobre la organización de su evento, me dijeron entre otras cosas que su gobierno apoya este tipo de esfuerzos al hacer contribuciones en especie como son noches de hotel, traslados desde el lugar de origen y dentro de la ciudad, alimentación y otro tipo de viáticos etiquetados exclusivamente para los visitantes, todo esto en una relación uno a uno contra la inversión realizada por los fabricantes. Así pues, vemos que la sinergia económica creada entre gobierno e iniciativa privada tiene como objetivo atraer nuevos mercados acercándolos con esta suma de voluntades, resultando en un intento que por separado sería muy difícil de conseguir.

De tal suerte que gobierno y empresarios contribuyen a formar un clúster en una actividad especifica en la que se forjan capitales y una identidad propia en el mundo industrial de la transformación para inversionistas, sindicatos, escuelas técnicas y población en general que tienen en San Luis su residencia.

También me confiaron que su forma de trabajar les ha redituado frutos no solo ante la competencia que tienen dentro de su país, sino también contra la realidad China, las amenazas de otras economías en crecimiento y la tradicional competencia que dentro de su ramo tienen por distintas razones con países como Brasil.

Quizás usted se haya quedado con la idea de que lo que viste fue San Luis, Missouri, en Estados Unidos, pero cuando me refería al arco blanco, quería decir que había pasado por Matehuala para llegar a la ciudad de San Luis Potosí. La muestra que empresarios locales y gobierno necesitamos no esta más allá de nuestras fronteras, la tenemos al alcance de la mano.
8444104775@prodigy.net.mx

No hay comentarios.: